El Gobierno Nacional de Javier Milei ajustó sobre las provincias y golpeó de lleno a la educación pública. En busca de superávit fiscal, paralizaron completamente las obras de construcción de nuevos edificios para escuelas y jardines en lugares sensibles de Río Negro. Recortaron el Fondo de Incentivo Docente y quitaron parte del sueldo de los maestros, en medio de la crisis económica generada por las malas decisiones del gobierno central.